El consumo de jamón en los hogares españoles, al alza
España es tierra de tradiciones culinarias arraigadas y, dentro de ellas, el jamón ocupa un lugar indiscutible como uno de nuestros tesoros gastronómicos más preciados. Cuidadosamente elaborado y envejecido, constituye mucho más que un simple alimento, puesto que es símbolo de la rica cultura nacional y una delicia que conquista paladares de todo el mundo.
Historia y tradición
La historia del jamón en España se remonta a siglos atrás. Ya romanos y fenicios dominaban la técnica de curar y secar la carne de cerdo en la península ibérica y, con el devenir de los tiempos, esta se fue depurando y perfeccionando hasta llegar a nuestros días como una parte fundamental de la gastronomía española.
Son muchos los momentos en los que acompañamos las celebraciones con este rico manjar. Aunque también recurrimos al jamón en el día a día, acompañando platos o disfrutando de deliciosas tapas.
Es por ello que nuestro producto más internacional se exporta a numerosos países y es apreciado por su calidad y sabor excepcionales, al tiempo que organizaciones y denominaciones de origen se encargan de protegerlo y certificar su autenticidad, garantizando su calidad y procedencia.
Un producto que no falta en la cesta de la compra
En cuanto al consumo de jamón en España, se ha convertido en un verdadero patrimonio gastronómico. Desde las técnicas de cría de cerdos hasta el proceso de curado, cada paso que se da se realiza con pasión y dedicación.
Según datos recogidos por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, en 2020, el consumo de jamón ibérico en nuestro país fue de aproximadamente 1,5 kilogramos por persona al año. Asimismo, de acuerdo con datos recogidos en el Informe de Consumo Alimentario en España 2021, ha aumentado el consumo per cápita del jamón y la paleta ibéricos, pasando en tan sólo un ejercicio de 0,48 kilos por persona a los actuales 0,51, el equivalente a consumir un 6,3 % más de producto.
Un producto que, aunque adscrito en gran parte a las festividades, y que no falta en las mesas navideñas y en eventos como bodas y celebraciones familiares, es consumido a diario por millones de familias en España. Así, y según datos de Interpoc, en los hogares españoles, en los últimos años, en concreto en 2018, se consumieron nada menos que 96,23 millones de kilos de jamón y paleta curados (81,8 procedentes de cerdo blanco y 14,43 de cerdo ibérico) del total de 249,71 millones de kilos de curados y salazones de cerdo (más del 38,5% del total).
En esta misma línea, la última estadística del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, constata que, todas las categorías cárnicas han descendido en su consumo, excepto el jamón y la paleta ibérica, que en 2022 han registrado un repunte del 6,4% respecto respecto al período anterior a la pandemia, cuando se consumían 390 gramos anuales frente a los 510 gramos de 2021.
En cuanto al consumo por comunidades autónomas, Andalucía encabeza el ránking del total de elaborados de porcino (donde el jamón ocupa el primer escalón), mientras que muy de cerca están Cataluña, Madrid y Comunidad Valenciana, seguidos después de Baleares, Cantabria, Navarra y La Rioja.
Una joya a cuidar
En Jamones Romero nos gusta decir que el jamón es bueno por lo que tiene y por lo que no tiene. Una joya gastronómica que tenemos que seguir cuidando para seguir ofreciendo a nuestra clientela la calidad y el servicio que se merecen y donde la elección de la materia prima y el tiempo de conservación, así como el máximo mimo y cuidado al detalle marcan nuestra diferencia. ¡Larga vida al jamón!
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