Guía sobre el correcto consumo de jamón ibérico

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Si vamos a un establecimiento especializado o a un supermercado a comprar jamón, nos encontraremos con una amplia gama de productos. En caso de no tener claro qué jamón queremos exactamente, lo más probable es que nos decantemos por aquel que tenga mejor pinta o que resulte más económico. Sin embargo, estos criterios no nos dan la seguridad de que ese vaya a ser el producto que más nos vaya a gustar o el más adecuado para la ocasión o para el plato que queramos cocinar.

Por eso, en Jamones Romero, te traemos la guía definitiva sobre los tipos de jamón, para que aciertes al 100% en tu próxima compra.

Te traemos la guía definitiva sobre los tipos de jamón, para que aciertes al 100% en tu próxima compra

Tipos de jamón según el nombre

Cuando estamos en un establecimiento especializado, lo común es encontrarnos jamones que, a primera vista, pueden parecer iguales, pero que tienen nombres distintos o ligeramente diferentes: bellota ibérico, cebo de campo ibérico, cebo ibérico…

Estos nombres se asignan según la crianza del cerdo porque, aunque no lo creas, dependiendo de dónde y cómo se ha criado el animal, el sabor de su carne varía. Por tanto, nos encontraremos con las siguientes denominaciones:

  • Bellota 100% ibérico: se trata de cerdos 100% de raza ibérica y alimentados con bellotas. Popularmente, se considera que este es el mejor jamón. Por ejemplo, la denominación “pata negra” sólo se utiliza para productos de bellota 100% ibéricos.
  • Bellota ibérico: estos cerdos también han sido alimentados con bellotas, pero su raza no es 100% ibérica.
  • Cebo de campo ibérico: esta carne proviene de cerdos criados en la dehesa y alimentados con hierba y piensos. El hecho de haber vivido en la dehesa, supone que el animal ha estado expuesto a menor estrés y, por tanto, su carne es más sabrosa.
  • Cebo ibérico: se trata de cerdos criados en un cebadero y alimentados únicamente con pienso. Puede parecer la peor opción frente a las anteriormente mencionadas, no obstante, su sabor es peculiar sin dejar de ser exquisito, lo que le convierte en el jamón favorito de muchos consumidores.

Una vez hemos aprendido a distinguir el jamón por su nombre, es momento de conocer el tipo de raza.

Tipos de jamón según la raza

Estamos acostumbrados a leer “jamón ibérico” en el etiquetado de los productos, sin embargo, ¿qué supone que un jamón sea ibérico?

La denominación “ibérico” hace referencia a la raza del cerdo y, en este caso, tal como sucede con otras razas de animales como, por ejemplo, los perros, un cerdo no necesariamente tiene que ser del todo ibérico: puede ser una mezcla.

Veamos los tipos de ibéricos que existen:

  • Raza 100% ibérica: esta raza de cerdos sería el equivalente a los purasangre entre los caballos, es decir, la mejor raza para el producto que queremos conseguir. Se trata de cerdos que tienen un 100% de pureza genética de la raza ibérica, lo que supone que tanto su madre como su padre son cerdos 100% de raza ibérica. Entre sus características destaca que el cerdo debe pesar mínimo 108 kg para ser sacrificado.
  • Raza 75% ibérica: en este caso, son cerdos que conservan un 75% de pureza genérica de la raza ibérica, puesto que provienen de una madre o padre 100% de raza ibérica y un madre o padre con 50% de raza ibérica. Su peso mínimo para el sacrificio es de 115 kg.
  • Raza 50% ibérica: estos cerdos tienen un 50% de pureza genética de la raza ibérica, ya sea porque su madre es 100% de raza ibérica y el padre no es un cerdo ibérico o al revés. Al igual que los cerdos de raza 75% ibérica, su peso mínimo para el sacrificio es de 115 kg.

No obstante, la raza no es la única característica determinante para el sabor del jamón: la alimentación también juega un papel central.

Tipos de jamón según la alimentación

Un cerdo ibérico, independientemente del porcentaje de pureza genética, necesita ser cuidado con una buena alimentación, lo que, posteriormente, conferirá a su sabor aún más matices y lo hará aún más exquisito.

Estos son los tipos de dieta que pueden seguir los cerdos ibéricos:

  • Alimentación de bellota: estos cerdos son alimentados con bellotas y recursos de la dehesa. Hay que tener en cuenta que, para que las bellotas potencien el sabor de la carne, se deben seguir una serie de reglas antes del sacrificio del animal. El cerdo ha de ser alimentado únicamente con bellotas durante 60 días antes de su sacrificio y ha de engordar 46 kg. Además, debe tener más de 14 meses de vida para ser sacrificado.
  • Alimentación de cebo de campo: la dieta de estos animales se basa en bellotas, recursos de la dehesa, piensos, cereales y legumbres. Además, ha de pasar más de 60 días en el campo antes de su sacrificio, teniendo en cuenta que, si pesa más de 110 kg, se requieren mínimo 100 metros cuadrados de campo para que pasee. Por otro lado, el cerdo debe tener mínimo 12 meses de vida para ser sacrificado.
  • Alimentación de cebo: se trata de cerdos cuya dieta se basa en piensos. En este caso, si el animal pesa más de 110 kg, se requieren mínimo dos metros cuadrados para que habite. Asimismo, no se podrá sacrificar el cerdo si cuenta con menos de 10 meses de vida.

Estas son las características principales que has de tener en cuenta a la hora de escoger un jamón ibérico. Elegir uno u otro dependerá de tus propias necesidades. Si lo que quieres es impresionar en un evento o una ocasión especial, te recomendamos optar por un jamón de bellota 100% ibérico, pero si lo que buscas es un producto para el día a día, con un cebo ibérico conseguirás unos platos deliciosos.

De todas formas, ten en cuenta que, en los establecimientos especializados, los profesionales del jamón te harán preguntas y te aconsejarán sobre el mejor jamón para tus necesidades, por tanto, el acierto está asegurado.

En Jamones Romero, llevamos más de 50 años dedicándonos a buscar el mejor producto y la máxima calidad que llevar a tu mesa. ¡No dudes en visitar nuestras tiendas físicas o explorar nuestra tienda online para encontrar el mejor jamón para tus seres queridos y para ti!