Los cerdos ibéricos de Lazo se crían en las dehesas del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche y Badajoz. Se alimentan de forma natural con bellotas durante la montanera. Esta cuidada alimentación hace que el jamón de bellota 100% ibérico Lazo tenga esa grasa infiltrada tan característica.
Esta característica confiere al jamón un sabor y aroma inigualables, llenos de matices.
El jamón de bellota 100% ibérico Lazo pasa su proceso de curación en el único secadero de madera construido en 50 años. La madera de estos secaderos, cuyo mantenimiento exige un cuidado constante, actúa como regulador natural de la humedad y la temperatura, a la vez que permite el paso del aire fresco de la Sierra de Huelva.